¿Ha oído hablar alguna vez del trasplante capilar?

Se ha convertido en un procedimiento muy popular entre las personas que sufren pérdida de cabello. Básicamente, consiste en tomar folículos pilosos sanos de una zona donante de la cabeza (normalmente la parte posterior o los laterales) y trasplantarlos a las zonas donde se está perdiendo el cabello. El proceso suele durar varias horas con anestesia local y, aunque al principio puede asustar, los resultados pueden cambiarle la vida. A la mayoría de los pacientes les crece pelo nuevo entre seis y nueve meses después de la intervención. Lo mejor de todo es que el pelo trasplantado seguirá creciendo de forma natural con el tiempo, igual que su pelo original. Si se siente acomplejado por la caída del cabello o el adelgazamiento de la coronilla, puede que merezca la pena considerar esta opción. Si desea más información, póngase en contacto con nosotros.